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En esta sociedad, donde todo gira en torno a la apariencia, delincuencia, sexo, drogas y conflictos económicos/sociales/culturales/raciales/clasistas/bélicos/ diplomáticos/políticos, en la que tiene más relevancia saber quién destruye primero qué o a quién; sin notar que destruir "al enemigo" es igual que destruirse a sí mismo, en la que cada vez existe más desviación, perversión, distorsión, muerte, violación, represión; simplemente "la vida vale menos y cuesta más".

En  este plano, en este espacio,en este mundo, en esta vida, en esta sociedad; todo esta encaminado hacia un abismo sin fin, en el que nadie, ningún Dios destruirá ni rescatará nada, porque de eso se encarga en cada respiro la raza humana, quien se desvive  por aportar su granito noche y día a la causa inconsciente. No será un elemento externo a ellos, no serán los "extraterrestres"; se trata de materializar lo que los "religiosos" llaman "apocalipsis", que ha sido tan impuesto, promovido y alienado en sus mentes, llegando al punto de incitar a cada persona, de su culto o no, a ejecutar  cada una de esas "profecías"; en lo que otros llaman <histeria colectiva>.

Hablan sobre hacer esto o aquello, sobre lo que esta "bien" y lo que no lo está; que una persona con tatuajes o piercings es un inadaptado, considerando más apto a un depravado sexual que a un sujeto que solo quiere actuar y vivir simplemente desde otra perspectiva (fuera de estereotipos y roles sociales preestablecidos). Esta humanidad diariamente se encuentra valorando, aceptando y hasta impulsando/estimulando a aquellos que se colocan cuanto implante o sustancia haya en el mercado para que sea más grande su pecho/trasero/labios/pantorrillas[...], y así cumplir con los "estándares de belleza según la tendencia o moda actual", estirando su rostro hasta el punto de convertirse en esperpentos mas parecidos a monstruos.. ¿será que solo desean manifestar su belleza interior?.

Matanzas, desolación, opresión; siempre son percibidas en los medios de comunicación, tanto que casi es aceptado como parte de lo "normal" y todo marcha hacia un caos total, considerado por unos, atribuidos por otros; y ninguno nota que lo que hasta ahora creen, perfectamente puede ser una caricatura que se idearon para darle respuesta a su conflicto existencial, ése en el que hay preguntas como: "¿quién soy?, ¿qué soy?, ¿por qué estoy?, ¿cómo llegué aquí?, ¿para qué sirvo?" [...], ¡la típica historia sin fin!.

Quién entiende la causa por la que el hombre siempre castiga, señala, etiqueta o justifica cada cosa que lo rodea; por qué siempre cataloga como "malo" lo que simplemente no entiende o inventa lo que no existe, valida lo imposible y desaprueba/menosprecia lo que no le gusta. Cada amanecer parece estar más decidido a destrozar/perturbar/tergiversar lo que ni siquiera es suyo, distribuyendo culpas por doquier sin notar que no existe nada más corrosivo que sí mismo, ¿será que cree tener otro "espacio" al cual irse?

...El hombre no es más que esa "plaga de langostas" que él mismo inventó.

Ánghela Di Marín